El proyecto que Pescanova tenía previsto para cabo Touriñán podría volver a retomarse con el nuevo ejecutivo. El presidente provincial, Carlos Negreira, confirmó que las variaciones del plan acuícola serán muy significativas para la Costa da Morte.
Carlos Negreira lamenta que el grupo, líder en el sector, se viese obligado a tener que optar por Portugal para llevar a cabo su fase de expansión, ubicando una planta en Mira. Confía en que esta apuesta por el país vecino, junto con el mal momento económico, no sean en la actualidad un inconveniente para acometer el proyecto de cabo Touriñán.
Desde un principio, Pescanova habló de construir en ese punto de la costa muxiana la mayor planta de rodaballo del mundo. Las instalaciones, cuya inversión era del orden de 40 millones de euros, generarían un total de 450 puestos de trabajo.
La empresa se había comprometido igualmente a llevar a cabo un tipo de construcción en la granja marina que causase el mínimo impacto visual y ambiental posible. Ello se vería favorecido por su ubicación en una parte baja del terreno del monte del cabo.