En el 2003, tras la catástrofe del Prestige, A Costa da Morte mostró su necesidad de suelo industrial, pero tres años después, siguen esperando ver resultados.
Si bien en el 2003 la idea era construir polígonos en la mayoría de los ayuntamientos de la zona, en estos momentos ninguno de estos parques está en funcionamiento.
Los trámites son complejos, y están acumulando múltiples retrasos tanto en la redacción de los informes, como en la adquisición de los terrenos. Por ejemplo en Cee, ya están disponibles todos los terrenos menos el de un propietario. Otro caso que ilustra esto es el polígono de Vimianzo, que aunque es el que más adelantado va, todavía falta algún terreno.
Fisterra y Sonería, que actualmente cuentan con 50.000 metros cuadrados, pasarán a tener cerca de 2 millones de metros cuadrados. Y Laracha tiene previstos 800.000 metros cuadrados y resalta por su cercanía a A Coruña.
Pero tal es la demanda existente, que a lo ocho parques previstos en el Plan Galicia, se le ha sumado otro de iniciativa privada de empresarios locales.
Sin embargo, los ayuntamientos demandan infraestructuras para poder competir con el resto de Galicia.